A pesar de que la madre del menor pidió que esperaran los resultados, los funcionarios de la clínica lo enviaron a cremación.

El menor de 4 años, identificado como Javier Martínez, falleció el pasado 11 de mayo en una clínica de Barranquilla y de acuerdo con Yasiris Trespalacios, madre del niño, no le permitieron despedirse de su hijo, pues según el personal médico, se trataba de un posible caso de Covid-19. 

El trabajador de la salud quien le comunicó la muerte de su hijo, le manifestó que al ser un posible portador de la enfermedad se debía enviar a cremación inmediatamente para prevenir nuevos contagios, pues según se conoció, el día que el menor murió había presentado tres paros cardiorrespiratorios y fue recibido bajo los protocolos requeridos en casos de pacientes contagiados por la pandemia. 

De acuerdo con Yasiris, ella se comunicó de inmediato con la funeraria para que le permitieran despedirse de su hijo, pero, la respuesta que recibió la dejó “helada”, ya que le informaron que Javier había sido cremado la misma noche que lo trasladaron. Pasadas 36 horas desde su fallecimiento, le comunicaron a la familia que el menor había dado negativo para Covid-19, por lo que la madre presentó la denuncia para que estos casos no se vuelvan a repetir. “Queríamos darle cristiana sepultura, como era debido, no con cantidad de personas, pero sí verlo de lejos”, dijo Johanis Meneses, abuela del niño.