Se trata de la Ley Ángel, que endureció las penas contra el maltrato animal, y la Ley Lorenzo, enfocada en garantizar el bienestar de los perros empleados en labores de seguridad privada.

La Ley Ángel, nombrada en honor a un perro cuya trágica historia de maltrato sensibilizó a la opinión pública, estableció medidas más estrictas para castigar la crueldad animal. Entre sus principales disposiciones se incluyeron:

• Prisión y multas: Se fijaron penas de hasta 56 meses de cárcel y multas entre 30 y 60 salarios mínimos para quienes causen la muerte de un animal.
• Para casos de lesiones, las sanciones oscilaron entre 20 y 48 meses de prisión, con multas de 15 a 30 salarios mínimos.
   
• Inhabilidades: Los responsables quedarán inhabilitados para poseer animales o trabajar en actividades relacionadas con ellos.
   
• Poderes reforzados para la Policía: Se permite a la Policía Nacional ingresar a viviendas sin orden judicial en casos de maltrato grave y evidente.
• Ruta nacional de atención: Se implementará una ruta unificada para atender y procesar casos de maltrato animal, además de capacitar obligatoriamente a fiscales, jueces y policías en protección animal.

Durante la misma ceremonia, el presidente también sancionó la Ley Lorenzo, que buscó garantizar mejores condiciones de vida para los perros utilizados en seguridad privada. Entre sus disposiciones se incluyeron:

• Reducción de la edad de servicio: Se estableció que los perros solo podrán prestar servicio hasta los seis años, reduciendo el límite anterior de ocho años.
• Planes de retiro y adopción: Las empresas estuvieron obligadas a implementar programas para garantizar el retiro digno y la adopción de estos animales.
• Condiciones laborales dignas: Se exige que los espacios de trabajo de los perros cumplieran con estándares mínimos de bienestar.
• Innovación tecnológica: Se promueve el desarrollo de tecnologías destinadas a reemplazar a los perros en estas tareas a mediano plazo.

Voz: Vivian Nieto quien fue la rescatista de Ángel y siguió de cerca el proceso.