Un nuevo estudio analizó cómo la cafeína influye en las emociones en la vida diaria. Los resultados sugieren que el consumo temprano de café puede favorecer sentimientos positivos.

Beber café al comenzar el día no solo ayuda a mantenerse despierto. Investigadores de Alemania y Estonia observaron que también está relacionado con una mejora del ánimo, en especial durante las primeras horas tras despertar. El trabajo se centró en jóvenes adultos y utilizó encuestas diarias para medir cambios emocionales después de ingerir cafeína.

En el primer estudio participaron 115 personas durante dos semanas, con más de 8.300 reportes. En el segundo, 121 jóvenes respondieron casi 20.000 cuestionarios en 28 días. Con estos datos, se identificó un patrón constante: tras consumir café, los participantes reportaron mayor entusiasmo, felicidad y satisfacción.

El efecto fue más fuerte en la mañana y se redujo con el paso de las horas. Los autores indicaron que la cafeína bloquea receptores de adenosina y aumenta la dopamina en regiones cerebrales vinculadas con el bienestar.