La jornada estuvo marcada por bloqueos, tensiones con la fuerza pública, rechazo al proyecto de Zonas de Estacionamiento Regulado (ZER) y la imposición de un toque de queda por parte de la Alcaldía.

Las protestas, que venían desde días anteriores, se intensificaron en la noche tras el anuncio de la alcaldesa Laura Londoño Rodríguez, quien confirmó que Terminales de Medellín no suspenderá el contrato de las ZER, argumentando razones jurídicas que imposibilitan su cancelación. 

Hacia las 9:00 p. m., la UNDMO hizo presencia en la zona para dispersar a los manifestantes. El operativo incluyó el uso de gases lacrimógenos y se reportaron al menos ocho estallidos, generando pánico en la zona céntrica.

En medio de la tensión, la Junta Defensora de Animales denunció la muerte de varios animales domésticos, presuntamente por la exposición a los gases.

La administración municipal expidió el Decreto 085 de 2025, con el que se decretó toque de queda y ley seca en el municipio. La medida incluye también la prohibición del parrillero en motocicleta durante las noches hasta el domingo 21 de septiembre.

Mientras tanto, las autoridades hacen un llamado a la calma y se espera que los canales de diálogo continúen abiertos para buscar soluciones a fondo que eviten nuevas alteraciones del orden público