RAP-E y CAR firman acuerdo para mejorar la seguridad hídrica en Cundinamarca
La iniciativa se centrará en la protección y conservación de cuencas hidrográficas y páramos estratégicos.
La Región Administrativa y de Planificación Especial (RAP-E) y la Corporación Autónoma Regional de Cundinamarca (CAR) han firmado un memorando de entendimiento con el objetivo de fortalecer la seguridad hídrica en el departamento de Cundinamarca.
La iniciativa se centrará en la protección y conservación de cuencas hidrográficas y páramos estratégicos, asegurando así el suministro de agua para la región central del país. Ricardo Agudelo, gerente de la RAP-E, destacó la importancia del acuerdo: “Este acuerdo es clave para trabajar en la seguridad hídrica y la conservación de las fuentes de agua. Vamos a priorizar las cuencas y páramos que abastecen a nuestras comunidades, porque son las más afectadas por fenómenos climáticos extremos”.
Las acciones conjuntas se implementarán en las cuencas de los ríos Bogotá y Sumapaz, así como en los páramos de Chingaza, Sumapaz, Guerrero y Guacheneque. El convenio incluye proyectos de monitoreo y restauración de fuentes hídricas, apoyados por la cooperación internacional. Agudelo añadió: “Hemos gestionado recursos con el Fondo para la Vida y la Biodiversidad por 91.000 millones de pesos y con la cooperación italiana por 16.000 millones de pesos para fortalecer la seguridad hídrica en Cundinamarca”. Estos fondos se destinarán a restaurar zonas degradadas y mejorar la capacidad de las comunidades para gestionar el recurso hídrico.
La primera fase de ejecución se enfocará en la Cuenca del río Bogotá, considerada vital para el suministro de agua en la región. Agudelo subrayó la necesidad de transformar el uso del ecosistema: “Es fundamental transformar la manera en que se utiliza el ecosistema. Debemos proteger las cuencas que alimentan a nuestras poblaciones y que son esenciales para enfrentar el cambio climático”. La implementación de estas acciones se alineará con la sentencia de recuperación del río Bogotá, en la cual participan diferentes entidades territoriales.
El éxito de la iniciativa dependerá de la coordinación entre municipios, comunidades y entidades ambientales. Agudelo concluyó: “Vamos a trabajar de la mano con las organizaciones locales para fortalecer sus capacidades en la protección de cuencas y páramos, porque son ellos quienes mejor conocen el estado de nuestros recursos hídricos”.
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